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Todos estamos acostumbrados a que cuando nos llega una renovación de software al final se ganen nuevas cualidades, siendo esto lo que se destaca siempre por parte de los desarrolladores. Pero la realidad es que en muchas de las actualizaciones se pierden funciones o programas de los cuales no nos damos ni cuenta porque están obsoletos y no los usa casi nadie.

¿Alguna vez te has preguntado por qué algunas empresas tienen éxito mientras que otras fracasan? La realidad es que el mundo empresarial es implacable y el fracaso es una posibilidad muy real. De hecho, se estima que más del 50% de las empresas no logran sobrevivir más allá de los primeros cinco años.

La Universidad de Harvard cuenta con la Escuela de Salud Pública que recomienda hábitos y cómo llevar un estilo de vida saludable. En una de sus recomendaciones proponen una tarea para mejorar la forma física y obtener muchos beneficios. Caminar es una de las tareas físicas que se suele recomendar en general para todas las poblaciones, pero hay otra que puede ser incluso más interesante para las personas mayores de 50 años.

Los AirPods son unos audífonos intrauriculares y, como este último término indica, se han de llevar en la oreja para que sean funcionales. No, no son un altavoz, aunque eventualmente pueden servir como altavoces. Que no es equiparable a un equipo pensado para ello es algo evidente, pero faltaba saber hasta qué punto son funcionales.

En redes sociales como TikTok o Instagram se está volviendo a viralizar un viejo truco con el que convertir unos AirPods en un altavoz.

Los perjuicios de reutilizar el aceite de freír son bastante conocidos. Cuando se cocinan alimentos con azúcares, como el almidón de las patatas, el calentamiento puede dar lugar a sustancias cancerígenas, como la acrilamida.