Esta semana será recordada como una de las más movidas en el sector de la inteligencia artificial, con Midjourney v5 ya disponible o la llegada de ChatGPT a la suite de Microsoft Office mediante Copilot. Pero ambas anuncios han quedado en un segundo plano con el lanzamiento de GPT-4. Si con ChatGPT-3,5 la sensación era la misma que cuando usamos internet por primera vez (la frase y el artículo es de Javier Lacort, pero la hago propia porque siento lo mismo), GPT-4 va un paso más allá.