A finales de la década de los 90, y a rebufo de la exitosa franquicia cinematográfica de Batman iniciada por
Tim Burton, Warner Bros. se propuso hacer una nueva film basada en el Hombre de Acero. Era el momento perfecto: el evento de La Muerte de Superman en los cómics había generado un fenómeno a escala mundial. El desafío en sí era renovar al icono para la gran pantalla. Y justo ahí es donde entran
Kevin Smith y Jon
Peters en la ecuación.
Kevin Smith, en su casa, contando su participación en el filme para el documental The Death of Superman Lives: What Happened?
Kevin Smith apenas necesita presentaciones: el director de Clerks o Mallrats es además guionista, productor y, de vez en cuando, interpreta a Bob el Silencioso en sus propias filmes. Un tipo nacido en Nueva Jersey que se sabe defender con soltura en la jungla de Hollywood y su fauna.
Eso sí,
Kevin Smith es sobre todo un apasionado de los cómics. Algo que se notaba en sus primeros trabajos y que en aquella época no era tan habitual entre los ejecutivos y cineastas de los grandes estudios. ¡Hasta logró que Stan Lee hiciese un cameo en sus filmes antes de que Marvel Studios existiese! Elementos que, le atarán de por vida a la peor film de Superman que nunca fue.