Existen una formación de agua el
Himalaya con una peculiaridad única en el mundo que le ha valido uno de los nombres más perturbadores de los que tengamos memoria. Estamos hablando del
Lago Roopkund, o como la mayor parte de la gente lo conoce:
el lago de los esqueletos. Un mote que recibe justamente porque eso es lo que hace. Ocasionalmente, cada cierto tiempo, el agua arroja los restos de cuerpos humanos.
Nos topamos de nuevo ante una historia que logró
su mayor clímax viral hace algunos años pero que ahora por algún motivo ha vuelto a adquirir relevancia entre las tendencias actuales de 2024. Tal como pasó con aquella historia antigua de
cuando Elon Musk quiso venderle Tesla Motors a Apple. Pero el asunto con el lago de los esqueletos resulta mucho más inquietante.
En las remotas montañas del
Himalaya, a una altitud tétrica y gélida de
4,800 metros, se encuentra un lago glacial con un pasado turbulento cuyo pasado nos persigue hasta nuestros días: el
Lago Roopkund, también conocido en la web como el lago de los esqueletos. Todo ello debido a una peculiaridad única que lo distingue desde su descubrimiento cartográfico oficial allá por el año de
1942.
Y es que este lugar ha fascinado e intrigado a científicos, esta formación de agua suele arrojar a la superficie restos humanos óseos.