Estrenada en 1994, Double Dragon: el filme (además conocida como Doble Dragón) no funciona del todo como una adaptación a la gran pantalla del clásico homónimo de los salones recreativos. Incluso, si retiramos los contados lazos que la atan al título de Technos, cuesta justificar que estemos ante un filme medianamente buena. Otra cosa es que, a su modo, logra ser entretenida.
Su trama es predecible, sus chistes malos y sus héroes y villanos de manual.