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El proceso de oposición es sin duda un momento para la vida de cualquier alumno realmente estresante. El hecho de aprender decenas de temas para enfrentarte a un examen que puede darte un trabajo de manera indefinida o el acceso a una plaza de interinidad hace que la presión que se tenga encima de los hombros sea realmente intensa.

Tal es la presión que se tiene que soportar en este sentido que llega un momento que se puede acabar encallando en los métodos de estudio.

A origenes del mes pasado, nuestros camaradas de Vida Extra detectaron un interesante dato en el mapa de tráfico global de Steam: la plataforma de distribución de videojuegos registraba tarea en la Antártida. El hallazgo no dejaba de ser curioso dado que, aparentemente, había jugadores en una de las regiones más frías, secas y ventosas del planeta.

Hablar de una aplicación que lleva seis años sin actualizarse no suele ser sinónimo de nada bueno. De hecho, suelo huir e invitar a ello a quienes tengan intenciones de descargarla. Sin embargo, esta app es una excepción en todos los sentidos. Se llama PAPERS.co y es la que llevo años usando para encontrar wallpapers.

Cambiar el fondo de pantalla del iPhone cada día (o al menos muy regularmente) es una de mis pequeñas obsesiones. Y eso que es la opción de personalización más básica.

Acabamos de vivir un momento histórico con el eclipse solar total del 8 de abril de 2024, pero en paralelo con este fenómeno surgió una tendencia curiosa en redes sociales y otros terrenos de la web, en donde se aseguraba que la Organización Europea para la Investigación Nuclear, mejor conocida como CERN, activaría su Gran Colisionador de Hadrones (LHC), exclusivamente en el marco de este fenómeno astral, con la supuesta finalidad de buscar detectar materia oscura.

Recuerdo abrir aquellas dos cajas, poner el monitor y el teclado encima del escritorio de la salita de nuestro primer piso. Mi padre trataba de entender como funcionaba todo aquello y yo ya tenía un cassette en la mano. Ese cuatro del doce de 1987 encendía por primera vez mi primer ordenador, un Amstrad CPC 464. Años más tarde - a comienzos de los noventa - en el cuarto trasero del quiosco de una amiga del instituto, vi mi primer Macintosh.