El pasado viernes, la compañía de ciberseguridad CrowdStrike lanzó una renovación de contenido para su sensor Falcon, destinada a sistemas operativos Windows. Desafortunadamente, esta renovación contenía un error lógico que producía la aparición de la temida 'pantalla azul de la muerte' en los equipos en que se instalaba, dejando a numerosos sistemas inoperables.