Según el velocímetro de mi Ducati voy a 225 kilómetros por hora. Creo que podría apurar algo más, pero tras la gran recta del histórico Indianapolis Motor Speedway vienen curvas traicioneras. Lo bueno de MotoGP 24 es que las vas a afrontar con la misma pasión y determinación tanto si vienes de nuevas como si eres un veterano de la saga. Lo mejor es cómo a su exquisita sensación estar peleando con contra la propia trazada se le han añadido más matices frente a entregas previos.