Promocionar una u otra criptomoneda puede ser un deporte de riesgo, especialmente si tu credibilidad depende del comportamiento de estas en los meses y años siguientes. En las últimas semanas el valor de muchos criptoactivos ha caído a cero, siendo un grave problema no sólo para aquellos que han invertido, sino para los que recoemndaron invertir y monetizaron de este modo su influencia en redes sociales.
Independientemente de la validez de las
criptomonedas, de la tecnología blockchain o de la utilidad de los NFTs, muchos criptoactivos básicamente han sido un Pump and Dump, el clásico movimiento de inflar el precio de un activo y luego alejarse de él.
Por otro lado la credibilidad de los
influencers depende de su certeza, por otro lado es cierto que muchos están perdiendo además su fortuna personal en muchas
criptomonedas. De hecho, es gracioso como han desaparecido de muchos avatares los ojos rojos de muxchos gurús.
El presidente de El Salvador tiene más de cuatro millones de seguidores en Twitter, siendo presidente de un país de poco más de seis millones. El 5 de junio de 2021 anunció que el Bitcoin se convertiría en moneda de curso legal cuando este rodaba los 35,000 dólares, (a día de escribir estas líneas está en menos de 20,000 dólares) y el 25 de junio que la cartera oficial sería la app Chivo. Esta aplicación ha fracasado, el 60% de sus clientes abandonaron la aplicación y muchos han reportado transacciones no autorizadas.