Lo que ha ocurrido durante este fin de semana en el mundo de las IA puede calificarse como un terremoto.
Sam Altman, CEO de
OpenAI, fue fulminantemente despedido el pasado viernes. Y eso sólo fue el principio de un buen lío: los inversores reaccionaron con decepción y enfado ante este movimiento y la junta directiva ha tenido que moverse rápido.
Todo el mundo ha coincidido en el valor y la experiencia de
Sam Altman a pesar de ese despido, así que en Applesfera no hemos podido evitar pensar en el paralelismo de cuando el entonces CEO de Apple fue despedido de la Apple que él mismo fundó. Pero los efectos de ese despido y el de Altman han sido bien diferentes.
El artífice de despedir a
Steve Jobs en 1985 fue John Sculley, quien a su vez fue elegido por el propio Jobs. Eso llevó al cofundador de Apple a buscar otras aventuras, como fundar NeXT y desarrollar NeXTSTEP, o involucrarse en levantar el estudio cinematográfico Pixar.
No fue hasta 1996 que Apple llegó a un acuerdo para recuperar a Jobs en el cargo de asesor adquiriendo NeXT. Y al cabo de un año más, darle la batuta de nuevo como CEO. Fueron once años en los que
Steve Jobs no se quedó quieto y montó las propuestas necesarias para resurgir
Sam Altman fue despedido el viernes, pero los acontecimientos se han desarrollado mucho más rápido de lo que pasó con
Steve Jobs.
Ranking de blogs
