Resident Evil

Geoff Keighley tiene un gran plan para ocupar el sonado vacío del E3. Su nombre en clave no es ningún secreto: ya hemos vivido cuatro Summer Game Fest consecutivos y en todos han habido grandes anuncios. Eso sí, su relevancia ante el panorama que se nos abre es completamente nuevo: ambiciona ser el mayor evento de videojuegos de todo 2023 junto con su gala hermana: los Game Awards. Para lograrlo, la clave será la de permanentemente: mostrar juegazos y sorpresones en ráfaga.

Seis películas y más de 1,230 millones de dólares recaudados. Ese es el bagaje de la saga de 'Resident Evil' cuando ha estado encabezada por Milla Jovovich dando vida a Alice. Sin embargo, la adaptación cinematográfica de los videojuegos de Capcom pudo ser muy diferente, ya que la propia actriz ha desvelado que Michelle Rodriguez estuvo a punto de ser la gran protagonista de la función.

Ningún filtrador de renombre ha dicho nada acerca de lo que podríamos ver respecto al gaming con las Reality Pro más allá de que las posibilidades que ofrece el dispositivo, pero a pocos días de la WWDC23 ya podemos mencionar algunos juegos concretos que podríamos ver en xrOS.

No es que se hayan filtrado, es que los máximos responsables de su desarrollo han lanzado mensajes en redes sociales que no dejan demasiado lugar a dudas.

Regresan el sigilo y la acción táctica, ambos resaltados y en negrita. La Misión Virtuosa vuelve a estar en activo, y lo único capaz de detener una catástrofe a escala planetaria es el mejor soldado del siglo XX. Metal Gear Solid Delta: Snake Eater es la puesta al día de uno de los mejores videojuegos del milenio, y -de manera generalizada- considerado el cenit de la saga de Hideo Kojima.

Resident Evil 4 Remake revivió el interés por la franquicia de muchos gamers en todo el mundo tras su presentación en marzo. La versión renovada del recordado título de 2005 trajo a personajes queridos de RE, incluyendo a Ada Wong.

Al igual que el Resident Evil 4 original, el remake transcurre seis años después de la catástrofe biológica en Raccoon City, cuando el agente Leon S.

En 2012 se lanzó uno de los RPG de acción más mágicos que hemos visto desde entonces y de los mejores títulos que ha desarrollado Capcom en estos últimos diez años, como es el caso de Dragon's Dogma. Desde aquel momento son muchos los que han estado pidiendo a gritos que el juego contará con una secuela, algo que por fin se hizo oficial el año pasado cuando se anunció Dragon's Dogma II.

Todavía no había cumplido los diez años cuando entré por primera vez a la mansión de Derceto. O, al menos, cuando empecé mi partida del Alone in the Dark original. Durante semanas aprendí, sufrí y memoricé cada pedacito de aquella aventura a base de palos, de ensayo y error, y te confieso que las incontables referencias a las obras de H. P. Lovecraft y Edgar Allan Poe pasaron por delante de mi cara sin que en su momento les echase cuenta. Eso sí, estaba tan aterrado como fascinado.

La aparición hace ya casi diez años de los cartuchos de E.T. enterrados en Nuevo México, prueba de hasta qué extremo pueden llegar las cosas cuando un proyecto no sale como se esperaba, me ha hecho meditar sobre la palabra fracaso y el uso tan alegre que en ocasiones hacemos de ella en el mundo del videojuego desde medios especializados, foros de cualquier clase y charlas entre amigos.