Todos lo hemos jugado hasta la extenuación y ha habido auténticos piques con familia y amigos por su culpa. El Monopoly es el juego de mesa moderno más exitoso y cumple la premisa básica de abrazar el capitalismo en su más pura esencia para forrarnos. Esa es la idea que tenía en mente Charles Darrow, el creador original que registró el título en 1935. O al menos eso es lo que creíamos.