Geoff Keighley tiene un gran plan para ocupar el sonado vacío del E3. Su nombre en clave no es ningún secreto: ya hemos vivido cuatro Summer Game Fest consecutivos y en todos han habido grandes anuncios. Eso sí, su relevancia ante el panorama que se nos abre es completamente nuevo: ambiciona ser el mayor evento de videojuegos de todo 2023 junto con su gala hermana: los Game Awards. Para lograrlo, la clave será la de permanentemente: mostrar juegazos y sorpresones en ráfaga.
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