Puede que, de entre toda la primera hornada de películas del Universo Cinematográfico de Marvel, la 'Thor' de Kenneth Branagh se la que recibió la mayor cantidad de palos por parte de público y crítica. La apuesta del británico, como era de esperar, fue muy particular en su empeño por abrazar la tragedia shakespeariana, y eso no cuajó con todo el mundo; pero donde sí despuntó fue en su modo de perfilar un reparto casi perfecto.