Con "Dune: Parte Dos" en cines, u "Oppenheimer" dispuesto a arrasar en los Premios Óscar esta noche, se está hablando mucho de cine épico en su concepción más evidente. Escala grande, palpable incluso con sólo ver una imagen. Pero el épico americano abre además el concepto a historias más humanas, con ejecuciones maximalistas pero enfocadas a una emoción que se prolonga en el tiempo y en el espacio.